Aun en pleno siglo XXI el sexo sigue siendo un tabú dentro
de la sociedad. Este tema vive encerrado en un nido de prejuicios que fueron creados a partir de mitos, chismes o
por el ideal de una cultura o una religión en específico que se han ido
divulgando de generación en generación. Sin embargo, el sexo es un acto natural
del ser humano que proporciona placer sexual y su fin último es la
reproducción. Es decir: que todo ser humano nació de un orgasmo y que en algún
momento de su vida experimentará al menos una experiencia sexual ya sea en pareja
o en solitario. Cabe destacar que aun cuando hemos evolucionado en ideas,
tecnología y en construcciones sociales, hablar de sexo se considera en cierta
parte un tema delicado y no apto para algunas edades.
Si nos remontamos a
nuestra infancia, es común recordar cosas como cuando veíamos una película con
nuestros padres, en la cual por alguna razón se presentaba una escena en donde
los actores tenían relaciones sexuales o simplemente se besaban. De inmediato,
se nos obligaba a taparnos los ojos y los oídos como si fuera algo de otro
mundo y fuera de nuestra naturaleza.
Por mi parte,
siempre quedé con la duda de saber la razón por la cual mis padres me obligaban
a no ver ni escuchar ¿Realmente era algo tan malo? Ahora yo siendo mayor de
edad, con ideas un poco más maduras, puedo entender en parte la actitud de mi
familia; sin embargo creo que este acto solo genera más intriga y curiosidad.
Para comenzar a
hablar acerca del tabú del sexo, es necesario definir la palabra “Tabú” en
primera instancia, concepto que en pocas palabras significa prohibición, de
comer, tocar, hacer o ver algo.
Ahora bien, el sexo
refiere, incluso con solo nombrarlo, un sin fin de temas relacionados a este
que no siempre tienen que ver directamente. Se le asocia con corrupción,
perversión, homosexualidad, pornografía e incluso promiscuidad.
Desde tiempos muy
remotos, el sexo se ha considerado como un tema íntimo y por tanto debe
permanecer oculto. Los tabúes en la sociedad, mayormente tienen que ver con la sexualidad, siendo este un
acto propio de los seres vivos, la diferencia es que los seres humanos no
necesariamente lo usamos como canal de reproducción sino como una morada de
placer.
Ahora, debemos analizar que el génesis de
nuestra formación se centra en su mayoría en nuestra familia y nuestro lugar de
estudios en primera instancia. Estos dos entes son los encargados de formar al
individuo en diferentes situaciones. Las escuelas, liceos y universidades van
más hacia lo profesional y lo ético. La familia se encarga de impartir valores
y comportamientos que le servirán a esa persona para enfrentarse ante la vida. Entonces
estos dos entes deben ser los encargados de formar individuos con una noción
del sexo moderna para luego no contribuir a problemáticas como el embarazo no
deseado en adolescentes y las enfermedades de transmisión sexual. Es necesario
que como profesores, maestros y padres analicemos en cuanto a esta situación y les
brindemos a nuestros hijos o alumnos una educación sexual sin prejuicios, sin
mitos y sin tabú.
¿Es necesario
inventar y divulgar mitos acerca de la virginidad? ¿Es necesario contribuir a
la propagación de desinformación en el ámbito sexual? ¿Vale la pena ocultar y
prohibir aun cuando sabemos que somos seres humanos y que el sexo representa
una necesidad biológica?
Considero que
viviendo de tabúes solo nos atrasa como sociedad y nos vuelve ignorantes. Nos
aleja de la realidad, genera otras problemáticas y nos prohíbe saber acerca de
ciertas cosas. Pienso que debemos hablar más del tema y educar al otro en vez
de crear prejuicios.
El no hablar de
sexo solo ocasiona que sigamos cometiendo errores por la mala o poca
información que se nos proporciona. Creo que es fundamental que como sociedad
abramos espacio para el análisis de la formación sexual que les estamos dando a
nuestros hijos. Es necesaria la existencia de campañas y charlas que instruyan
acerca del embarazo no deseado y las múltiples enfermedades de trasmisión
sexual que puede haber.
Por ejemplo, con
una charla acerca de estos temas ya mencionados, dirigida específicamente a los
jóvenes se puede conseguir que estos disfruten su juventud de la mejor manera
sin preocupaciones de bebes o enfermedades.
Debemos hacer eco
de que el sexo es solo un acto natural y que al estar más informados acerca de
este estamos contribuyendo al desarrollo de una sociedad donde este tema sea
considerado como un acto natural que solo satisface una necesidad biológica
A ti, lector
curioso, vive y dejar vivir tu sexualidad y la de los demás de manera libre
pero contribuye a la evolución de la sociedad haciendo eco de la educación
sexual idónea que deje de lado a los mitos y prejuicios relacionados con el
sexo.
La opinión de: Joselyn
Fernandes
Instagram: @joselyn_fernandes
Twitter: @mielpimienta