Durante los últimos
meses el aborto ha llamado mucho la atención siendo uno de los temas más polémicos en Latinoamérica y el mundo. Las múltiples protestas
feministas nos hacen entender cómo las mujeres de la actualidad están disgustadas
totalmente con respecto a la penalización del aborto. Es y ha sido un tema de
qué hablar y muy polémico, sobre todo, entre los jóvenes.
La iglesia Católica con
muy descontento, ha estado tras este insensato acto de protestas ante la
legalización del aborto, pero según parece, no ha logrado más que enfurecer más
la población feminista y todos aquellos que están a favor de la despenalización
del aborto. La cuestión ante todo lo que vemos en nuestro día a día, con respecto
a la dura contingencia que ha provocado el tema del aborto en el mundo, podría
ser: Cuándo una mujer aborta ¿está quitándole la vida a su hijo?
La finalidad de este artículo
sería analizar desde mi perspectiva la realidad que existe con respecto al embarazo,
por qué hay tanto disgusto con la penalización de aborto y qué sería correcto hacer
con respecto a este gran debate.
Principalmente, es
obvio tener que decir que la causa principal de que haya personas a favor del
aborto es debido a la gran tasa que existe hoy en día de embarazos precoces, es
decir, por mujeres jóvenes embarazadas. Con mucho respeto, pero viendo la
realidad, la inmadurez y la poca educación sexual, ha provocado múltiples
embarazos precoces y, obviamente, cuándo una joven está embarazada, tiene que abandonar
todo lo que la juventud propone para su crecimiento y este embarazo precoz
causa querer abandonar por completo cualquier responsabilidad correspondiente a
un bebé. Según la OPS, UNFPA y UNICEF, se estima que hay un 15% de natalidad en
mujeres menores de 20 años y sobre todo en América Latina.
‘’La
tasa mundial de embarazo adolescente se estima en 46 nacimientos por cada 1.000
niñas, mientras que las tasas de embarazo adolescente en América Latina y el
Caribe continúan siendo las segundas más altas en el mundo, estimadas en 66.5
nacimientos por cada 1,000 niñas de entre 15 y 19 años, y son sólo superadas
por las de África subsahariana, indica el informe’’.
También podemos destacar
que, la mortalidad que un embarazo precoz causa, llama la atención primordial
de todo el mundo: ‘’O es la vida del bebé o la vida de la mujer’’. LA OPS,
UNFPA y UNICEF, además de afirmar la existencia gravemente notable de la mortalidad
causada por embarazos precoces, indicaron cifras estadísticas en Latinoamérica:
Gráfica de mortalidad materna según la OMS y PAHO |
‘’La
mortalidad materna es una de las principales causas de muerte en las
adolescentes y jóvenes de 15 a 24 años en la región de las Américas. A modo de
ejemplo, en 2014, fallecieron cerca de 1900 adolescentes y jóvenes como
resultado de problemas de salud durante el embarazo, el parto y el posparto. A
nivel global, el riesgo de muerte materna se duplica en madres más jóvenes de
15 años en países de ingreso bajo y mediano. Las muertes perinatales son un 50%
más alta entre recién nacidos de madres menores de 20 años comparado con los
recién nacidos de madres de 20 a 29 años, indica el informe’’.
Ahora bien, iré directo
a lo que mencionaba al principio del artículo, ¿Es una madre asesina de su hijo
si lo aborta? La respuesta vendría
siendo el punto principal sobre la mesa. La UCL (University College London) determinó
en un estudio científico, cuándo un embrión comienza a sentir estímulos con
respecto al dolor: ‘’Los bebés pueden
distinguir diferentes estímulos dolorosos recién a partir de la semana 35 de
gestación (con reacciones cerebrales específicas, muy similares a las de un
niño o adulto)…’’
Aunque no está totalmente
determinado si un feto puede sentir antes de esas 35 semanas de gestación como
dijo la doctora Rebeca Slater: “no
podemos afirmar que antes de este cambio en su actividad cerebral los fetos no
sientan dolor”, de igual modo llama mucho la atención a la hora de querer
abortar. De igual modo, y más que lógico, se sabe muy bien que las primeras
semanas de embarazo se trata, literalmente, de un espermatozoide dentro de un
óvulo fecundando, es decir, cuándo ocurre la fecundación, es lógico admitir que
siguen siendo un espermatozoide y ovulo juntos inventando dar vida a un ser. No
haría falta saber si siente dolor entre la primera y segunda semana, pues todavía
estaría en proceso dar vida. De allí responde mi pregunta, pues, el aborto no
sería más que exterminar unas células si se lleva a cabo las primeras semanas,
mientras más temprano mejor.
El aborto, moralmente
lleva mucho peso en la consciencia, ya que hablamos de quitarle una oportunidad
de vida a un ser, sin embargo, no estaría quitándole directamente la vida y, a
parte según pienso, no es un ser que llega a existir solo estaría en proceso.
Legalizar el aborto, además de detener muchos embarazos precoces y muertes,
sería una buena opción para avanzar como humanidad, sin embargo, también sería
una sinvergüenza apoyar, de todos modos,
que sigan habiendo embarazos en menores de edad. Mientras el aborto sea legal,
incluso más que antes, habría que concentrar mucho más la educación sexual de
los jóvenes para que haya un balance y mejorar la sociedad juvenil.
Bibliografía:
OPS/OMS Venezuela (Organización Panamericana de Salud/Organización Mundial de la Salud):
By: Javier Castillo
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